Va pasando el tiempo, se bajan los humos. La vida sigue...
Hace meses que no escribo ni un triste emilio colectivo, sólo la tesis. La tesis que lo llena todo y se lo lleva todo. No queda nada en mí que no sea tesis, rige mis comidas, mis despertares, mis idas y venidas y hasta me deja cagar de vez en cuando. Como y cago didáctica, ética y motivación. Como y sigo sentada todo el puto día. No hago más que engordar la tesis, y la barriga. Cuando al fin para esta tesis nadie me va a reconocer.
No logro dormirme porque un imbécil en el trabajo se ha puesto territorial. A mi edad ya estas cosas no se llevan. Me entran ganas de decirle que cambie de paradigma. De hecho, es que se lo voy a decir.
Me he levantado porque no paraba de dar vueltas en la cama y no quería despertar al cuddle, tan dormidito, mañana tiene una reunión importante.
A veces no entiendo por qué la gente es tan infeliz que tiene que meterse con los demás para sentirse importante. Con lo fácil que sería llamarlo jardín, en vez de territorio...
M.
Wednesday, February 2, 2011
Sunday, November 14, 2010
Voy a darme al blog
Quizás no me dure mucho, pero creo que voy a volver a darme al blog.
I haven't had a coffee in 15 days.
Sin contar algún que otro tiramisú... ¿Dos? Y uno era de té verde.
Sundays under the rain in a Spanish provincial town.
Dejar a Yan en el minibus hacia el aeropuerto de Matacán, conducido por un vejete que no se tiene en pie.
I would have said Godforsaken town, if it weren't for the fact that old folks head for church as I explore the façades of the old town center hoping to find the words "For Sale".
Y luego, como cada domingo, busco en idealista.com el ático perfecto, que no existe.
I'm not sad when he leaves, just empty, fresh-faced, washed clean like the cobbled steets and the wet vehicles.
Ya me he acostumbrado a ir y venir; es una forma de vida, poco ortodoxa, como podría serlo cualquier otra, rara.
Amazingly, it works.
Besitos,
M.
I haven't had a coffee in 15 days.
Sin contar algún que otro tiramisú... ¿Dos? Y uno era de té verde.
Sundays under the rain in a Spanish provincial town.
Dejar a Yan en el minibus hacia el aeropuerto de Matacán, conducido por un vejete que no se tiene en pie.
I would have said Godforsaken town, if it weren't for the fact that old folks head for church as I explore the façades of the old town center hoping to find the words "For Sale".
Y luego, como cada domingo, busco en idealista.com el ático perfecto, que no existe.
I'm not sad when he leaves, just empty, fresh-faced, washed clean like the cobbled steets and the wet vehicles.
Ya me he acostumbrado a ir y venir; es una forma de vida, poco ortodoxa, como podría serlo cualquier otra, rara.
Amazingly, it works.
Besitos,
M.
Wednesday, August 11, 2010
Conducía un autobús
Conducía un autobús.
De esos pequeños, ni corto ni largo, no era ni minibus ni uno de esos con asientos cómodos; era uno de los antiguos, rechoncho, sin demasiado envoltorio, de los años ochenta, sin bandejitas de plástico para dejar la bebida, ni cinturón de seguridad. Tan sólo un cenicero metálico, negro y roto.
Yo buscaba mi mochila mientras ella conducía el autobús. Habíamos dormido en un chiringuito de la playa, en el suelo, sobre unas colchonetas de esas que se usan para hacer yoga o para tomar el sol. Habían preparado una excursión, o una fiesta, para veinte, o cuarenta, ya no recuerdo; sólo sé que yo había estado evitándole toda la tarde, hasta que vino a parar al mismo lugar de acampada que yo. Ni siquiera le saludé, y por la mañana me fui andando, creo que al aeropuerto, creo que por orgullo, o por miedo a lo conocido, y a lo desconocido, y a lo que hubiese venido después. A lo que nunca vendría, digo. Busqué mis mochilas, pero sólo encontré la verde y la pequeña, que es gris. La tercera estaba en el autobús, creo.
Recuerdo haber pensado que ignoraba que se hubiera sacado el permiso de clase B. Siempre había sido una niña muy dulce que conduciría un cochecito. Pero ya teníamos 22 años y ella conducía un autobús, aunque seguía estando gordita como en las fotos de antes, con el pelo largo y rubio. 22 añazos, y digo esto con seguridad, porque la mochila que yo buscaba era la azulona, la que se sujetaba con una cremallera a la mochilota de Mountain Equipment Coop. para hacer senderismo en las Rocosas que me había regalado el tío Bruce el verano anterior. No puedo perder ésa mochila, y tengo que llegar al aeropuerto.
El autobús se para, y le pregunto si tienen mi mochila, y hacia dónde van. Me dice que suba, que está todo controlado, monta, y déjate de salir por patas, María, busca tu mochila dentro, no puedes ir sola por la carretera al aeropuerto, en esta isla hay muchas playas, en qué estabas pensando, monta y cállate ya.
Como me hace ilusión verla, acepto. Le da al botón de abrir la puerta y allí están todos, las hermanas y todos los demás, y yo quiero bajarme nada más entrar. Decido quedarme detrás de la conductora y hablar con ella, pero me dice que me siente, que es peligroso ir de pie, que al fondo hay algún asiento libre. No quiero. Me estoy clavando la barra de la puerta del conductor en la cadera, pero no quiero sentarme detrás, porque sé quién estará allí y no me da la gana.
Hasta que alguien se da cuenta y viene a buscarme. Ya no me estoy clavando la barra de la puerta, al menos no en las caderas, what the hell. Estoy aplastada entre él y la puerta que separa a la conductora del resto del autobús. Y no es la barra quien se alegra tanto de verme. Mi mochila estará en alguna parte, voy a buscarla...
¿Habéis visto mi mochila? Llego hasta el fondo del autobús, donde me espera de nuevo, protestando porque no le he hecho ni caso. De nuevo esa sensación de saber todo sin decirse nada. Para ya de murmurar, le digo, sujetando su cara entre mis manos para explicarle, como si fuese un niño, ¿no ves que es imposible? Cuando uno es así, y el otro asá, hay incompatibilidad de caracteres. Ya, contesta, ya sé que no hay manera...
Miro hacia la ventana y allí está ella, escuchándonos, no sé quién coño estará conduciendo ahora este autobús pero tampoco me importa a estas alturas. Él parece no notar su presencia y me sonríe; yo me hago la ofendida, mi tono conlleva la emergencia de quien se siente atrapado: sé un caballero, ayúdame a encontrar mi mochila... quédate tú en el bus, si es esto lo que te gusta, pero échame una mano para que al menos yo pueda salir de una puta vez de aquí.
De esos pequeños, ni corto ni largo, no era ni minibus ni uno de esos con asientos cómodos; era uno de los antiguos, rechoncho, sin demasiado envoltorio, de los años ochenta, sin bandejitas de plástico para dejar la bebida, ni cinturón de seguridad. Tan sólo un cenicero metálico, negro y roto.
Yo buscaba mi mochila mientras ella conducía el autobús. Habíamos dormido en un chiringuito de la playa, en el suelo, sobre unas colchonetas de esas que se usan para hacer yoga o para tomar el sol. Habían preparado una excursión, o una fiesta, para veinte, o cuarenta, ya no recuerdo; sólo sé que yo había estado evitándole toda la tarde, hasta que vino a parar al mismo lugar de acampada que yo. Ni siquiera le saludé, y por la mañana me fui andando, creo que al aeropuerto, creo que por orgullo, o por miedo a lo conocido, y a lo desconocido, y a lo que hubiese venido después. A lo que nunca vendría, digo. Busqué mis mochilas, pero sólo encontré la verde y la pequeña, que es gris. La tercera estaba en el autobús, creo.
Recuerdo haber pensado que ignoraba que se hubiera sacado el permiso de clase B. Siempre había sido una niña muy dulce que conduciría un cochecito. Pero ya teníamos 22 años y ella conducía un autobús, aunque seguía estando gordita como en las fotos de antes, con el pelo largo y rubio. 22 añazos, y digo esto con seguridad, porque la mochila que yo buscaba era la azulona, la que se sujetaba con una cremallera a la mochilota de Mountain Equipment Coop. para hacer senderismo en las Rocosas que me había regalado el tío Bruce el verano anterior. No puedo perder ésa mochila, y tengo que llegar al aeropuerto.
El autobús se para, y le pregunto si tienen mi mochila, y hacia dónde van. Me dice que suba, que está todo controlado, monta, y déjate de salir por patas, María, busca tu mochila dentro, no puedes ir sola por la carretera al aeropuerto, en esta isla hay muchas playas, en qué estabas pensando, monta y cállate ya.
Como me hace ilusión verla, acepto. Le da al botón de abrir la puerta y allí están todos, las hermanas y todos los demás, y yo quiero bajarme nada más entrar. Decido quedarme detrás de la conductora y hablar con ella, pero me dice que me siente, que es peligroso ir de pie, que al fondo hay algún asiento libre. No quiero. Me estoy clavando la barra de la puerta del conductor en la cadera, pero no quiero sentarme detrás, porque sé quién estará allí y no me da la gana.
Hasta que alguien se da cuenta y viene a buscarme. Ya no me estoy clavando la barra de la puerta, al menos no en las caderas, what the hell. Estoy aplastada entre él y la puerta que separa a la conductora del resto del autobús. Y no es la barra quien se alegra tanto de verme. Mi mochila estará en alguna parte, voy a buscarla...
¿Habéis visto mi mochila? Llego hasta el fondo del autobús, donde me espera de nuevo, protestando porque no le he hecho ni caso. De nuevo esa sensación de saber todo sin decirse nada. Para ya de murmurar, le digo, sujetando su cara entre mis manos para explicarle, como si fuese un niño, ¿no ves que es imposible? Cuando uno es así, y el otro asá, hay incompatibilidad de caracteres. Ya, contesta, ya sé que no hay manera...
Miro hacia la ventana y allí está ella, escuchándonos, no sé quién coño estará conduciendo ahora este autobús pero tampoco me importa a estas alturas. Él parece no notar su presencia y me sonríe; yo me hago la ofendida, mi tono conlleva la emergencia de quien se siente atrapado: sé un caballero, ayúdame a encontrar mi mochila... quédate tú en el bus, si es esto lo que te gusta, pero échame una mano para que al menos yo pueda salir de una puta vez de aquí.
Friday, June 25, 2010
Pasado por agua
Llegará un día en el que encontraré inspiración en otros bares, en lápices rotos por otras aprendices y en el poemario de cualquier borracho que no me recuerde a ti. A lo mejor ésa noche estarás en otro mundo del que yo nunca formaré parte. Tronará. Me daré cuenta de que soy yo, no tú, quien siempre alimentó ése espíritu crítico. Sabré lo que buscabas y lo que no encontraste. Descubriré lo que no veías: entre otras cosas, a mí. Organizaré mis propias fiestas, sin honores ni parafernalias, ni un solo aplauso, no más que la sonrisa sin vítores tras sellar un trámite más. Un certificado médico diciendo que estoy sana. El anticlimax de un voto a mano alzada. Escribiré artículos como mejor sepa, y me leerán, pero no sabrán qué digo. Versarán mis garabatos de ética y no es algo que se explique en Sálvame Deluxe. Me dará rabia ser consciente de otras muchas cosas, eso sí; volver a verte, y que, ignorante, vuelvas a decir qué tal. Me dolerá mucho menos que antes, cada vez menos y poco. Podré tomarte el pelo y hablarte como en la radio. Contestaré preguntas, sin decir que sí, ni decir que no, observando, aprendiendo, acumulándolo todo. Experiencias, publicaciones y aquello que más me importa... aquello que no tenías, lo que ojalá buscases, lo que te faltará.
Sunday, June 20, 2010
Tuesday, March 9, 2010
Up in the air
Abrimos y cerramos fases, ciclos.
Llegamos a una madurez, avanzamos, nos estancamos, salimos, seguimos, aprendemos y nos vamos. Nos divorciamos, nos damos demasiado tiempo o menos del suficiente. On tourne la page éternellement. Volamos al siguiente aeropuerto de cualquier lugar del mundo y tomamos café con amistades pasadas, amantes, novios de varios años que fueron nuestros, que avanzan hacia otro sitio pero siguen oliendo igual.
La misma risa de Marta. Idénticas preguntas nerviosas del amigo de antaño. Y un viejo profesor de Historia de la Traducción me dice que todo es política y yo comienzo a entender. Otro, the Mad Hatter, me dice que tenga mucho cuidado in Wonderland. Uso la taza de té a la menta de Manu para calentarme las manos, pensando en el gesto, en la familiaridad adquirida de haber vivido con él. Tengo la impresión de que son todos amigos de mi infancia, en otro tiempo y un espacio surrealista. Si llamase Willy Fogg a la ventana del segundo piso de esta cervecería le hablaría sin sorpresa. Otro microcosmos, otra universidad y su parafernalia, a años luz. Y ésa sensación de que una vida es reinventable, pero que nunca se debe volver atrás.
Media década después, en el Mappa Mundo, o en un restaurante que se llama Fin de Siècle y al que esperaba llevarme por primera vez, me confiesa que no ha tirado el jersey verde. Que está solo y que hace frío en Bruselas también. Y yo le digo que soy feliz con mi vida en otro cosmos. Este sueño es mío.
Ya he estado en este restaurante, ¿sabes?
Y un "cuídate". Cuídate, niño. Yo ya no lo voy a poder hacer...
Llegamos a una madurez, avanzamos, nos estancamos, salimos, seguimos, aprendemos y nos vamos. Nos divorciamos, nos damos demasiado tiempo o menos del suficiente. On tourne la page éternellement. Volamos al siguiente aeropuerto de cualquier lugar del mundo y tomamos café con amistades pasadas, amantes, novios de varios años que fueron nuestros, que avanzan hacia otro sitio pero siguen oliendo igual.
La misma risa de Marta. Idénticas preguntas nerviosas del amigo de antaño. Y un viejo profesor de Historia de la Traducción me dice que todo es política y yo comienzo a entender. Otro, the Mad Hatter, me dice que tenga mucho cuidado in Wonderland. Uso la taza de té a la menta de Manu para calentarme las manos, pensando en el gesto, en la familiaridad adquirida de haber vivido con él. Tengo la impresión de que son todos amigos de mi infancia, en otro tiempo y un espacio surrealista. Si llamase Willy Fogg a la ventana del segundo piso de esta cervecería le hablaría sin sorpresa. Otro microcosmos, otra universidad y su parafernalia, a años luz. Y ésa sensación de que una vida es reinventable, pero que nunca se debe volver atrás.
Media década después, en el Mappa Mundo, o en un restaurante que se llama Fin de Siècle y al que esperaba llevarme por primera vez, me confiesa que no ha tirado el jersey verde. Que está solo y que hace frío en Bruselas también. Y yo le digo que soy feliz con mi vida en otro cosmos. Este sueño es mío.
Ya he estado en este restaurante, ¿sabes?
Y un "cuídate". Cuídate, niño. Yo ya no lo voy a poder hacer...
Monday, January 4, 2010
Friday, December 18, 2009
Reunión
Mi padre siempre me decía que no era bueno escribir borracho. Sí que pintaba borracho, a veces, de madrugada. Eso le salía bien. Y, cuando sonaba el teléfono, no se daba cuenta. Tampoco es que sonara mucho el teléfono de madrugada.
Lo de escribir, ya no le salía tanto; le faltaba autocrítica. Recuerdo haber leído algún cuaderno en el que esculpía y escupía y todos le parecían ridículos salvo él. Mismo. Ego. Yo tenía doce años y algunas opiniones bastante formadas: demasiado vocabulario y ninguna perspectiva; cero duende. Son cosas que se tienen o que no se tienen... Como la visión espacial y el espíritu crítico. Cantidades y tamaños.
Hablando de duendes, hoy he acudido a una reunión.
Después, he ido a otra.
La primera ha sido en el laboratorio de interpretación. Presente, de cuerpo entero, y ausente de corazón. Alguien ha dicho, en la segunda, que hace falta destruirlo todo para construir algo duradero. No sabía yo hasta hoy que fuera o fuese desconstructivista.
Me veía lejos, pensando en la nieve sobre los tejados (chim-chimney chim) de París, en Yan esperando cinco horas en Charles de Gaulle a que saliese su vuelo. Yan llegando ahora mismo, de madrugada, a un Madrid bajo cero con huelga de taxis. Yan durmiendo en el aeropuerto tumbado en cualqueir banco hasta las seis de la mañana. Huelga de búhos. Yan cogiendo el primer metro. Borrachos que pintan su nombre en las esquinas con un chorro de... ¿pis?
Poesía. No soy yo quien tiene que luchar en ése frente, compañeras. ¡Guapas! Os doy besos, aplausos, solidaridad. Sólo faltaba. Si digo que me ha gustado es porque es verdad. Queremos ser el otro, y nos da por escribir.
Hablamos todos y nadie dice nada. Nos vemos de lejos, al otro lado del espejo. Nos reunimos.
Por mí bien. Sigan ustedes reinventando, reventando, la rueda, mientras yo me dedico a la objeción de conciencia, y a mis labores.
Lo de escribir, ya no le salía tanto; le faltaba autocrítica. Recuerdo haber leído algún cuaderno en el que esculpía y escupía y todos le parecían ridículos salvo él. Mismo. Ego. Yo tenía doce años y algunas opiniones bastante formadas: demasiado vocabulario y ninguna perspectiva; cero duende. Son cosas que se tienen o que no se tienen... Como la visión espacial y el espíritu crítico. Cantidades y tamaños.
Hablando de duendes, hoy he acudido a una reunión.
Después, he ido a otra.
La primera ha sido en el laboratorio de interpretación. Presente, de cuerpo entero, y ausente de corazón. Alguien ha dicho, en la segunda, que hace falta destruirlo todo para construir algo duradero. No sabía yo hasta hoy que fuera o fuese desconstructivista.
Me veía lejos, pensando en la nieve sobre los tejados (chim-chimney chim) de París, en Yan esperando cinco horas en Charles de Gaulle a que saliese su vuelo. Yan llegando ahora mismo, de madrugada, a un Madrid bajo cero con huelga de taxis. Yan durmiendo en el aeropuerto tumbado en cualqueir banco hasta las seis de la mañana. Huelga de búhos. Yan cogiendo el primer metro. Borrachos que pintan su nombre en las esquinas con un chorro de... ¿pis?
Poesía. No soy yo quien tiene que luchar en ése frente, compañeras. ¡Guapas! Os doy besos, aplausos, solidaridad. Sólo faltaba. Si digo que me ha gustado es porque es verdad. Queremos ser el otro, y nos da por escribir.
Hablamos todos y nadie dice nada. Nos vemos de lejos, al otro lado del espejo. Nos reunimos.
Por mí bien. Sigan ustedes reinventando, reventando, la rueda, mientras yo me dedico a la objeción de conciencia, y a mis labores.
Sunday, October 4, 2009
Welcome to the Monkey House
Very seldom I read a book so good that I don't want to finish it. I keep leaving it here when I go somewhere, on purpose, so that it lasts... When I really love a book, I devour it; which is something unusual, these days, but it does still happen sometimes. Yet this one I treat like a bag of rare delicacies come from an exotic country across the world and I want it to last.
"The year was 2081, and everybody was finally equal. They weren't only equal before God and the law. They were equal every which way. Nobody was smarter than anybody else. Nobody was better looking than anybody else. Nobody was stronger or quicker than anybody else. All this equality was due to the 211th, 212th and the 213th Amendments to the Constitution, and to the unceasing vigilance of agents of the United States Handicapper General".
Kurt Vonnegut Jr.
Welcome to the Monkey House
"The year was 2081, and everybody was finally equal. They weren't only equal before God and the law. They were equal every which way. Nobody was smarter than anybody else. Nobody was better looking than anybody else. Nobody was stronger or quicker than anybody else. All this equality was due to the 211th, 212th and the 213th Amendments to the Constitution, and to the unceasing vigilance of agents of the United States Handicapper General".
Kurt Vonnegut Jr.
Welcome to the Monkey House
Tuesday, August 25, 2009
Qu'elle est belle, la tour Eiffel !
(foto: Emerald Lake, Yoho National Park, B.C. Canada)
Queridos todos:
Podría pedir perdón por haber tardado tanto en escribiros, pero no lo voy a hacer; no lo siento en absoluto. Me hacía falta un aire fresco o dos.
Os quiero, nevertheless, y aquí estoy de vuelta. Sigo tesiseando como una descosida, esta vez con vistas a la Torres Eiffel, desde casa de la madre del chati, que no está aquí y nos ha dejado su pisito guay.
Me levanto a las siete con el wakie wakie, hago un cafetito, y ¡hala! Cada vez que levanto la vista para hacer eso del micropause (el programita para descansar los ojillos, y el cuerpo, que me he instalado), admiro la torrecilla. Hace fresquito, porque estoy en un edificio alto y corre el viento. No hace falta rebequita.
(Foto: A bear in Grouse Mountain, Vancouver, Canada)
Hemos estado en Canadá (cruzando las Rocosas por la tarde y currando in the morning con el wakie wakie), en Salamanca (haciendo acto de presencia tesisuda y calentando la sillica, porque estas cosas son necesarias malheureusement en instituciones centenarias como esta nuestra honorable Casa), y en Cornwall, en la villita de la directora de tesis del chati, que nos ha tratado de lujo y nos ha hecho currrrrraaaaaar (sobre todo a mí, porque el chati ya terminó su tesis cuando era pequeño. Hacerme currar quiere decir darme la comidita, cuidarme y llevarme de paseos por las tardes solo.
Os adjunto unas foticos que hemso tirado. No hay más noticias... En cuanto a cotilleos varios departamentales, se nos va una profe a Alemania, y me da pena de la grande porque era dura de roer. Creo que eso es todo.
Ah, ¡es verdad! Se me olvidaba. Ahora mi vecino es rector en funciones, porque el anterior hombrico al parecer protagonizó un incidente de tipo escandaloso del que nadie en realidad sabe nada seguro, y decidió que lo más sensato era plantarse. Sean o no verdad los escabrosos detalles, lo cierto es que yo tampoco quiero opinar sobre algo que me han contado de quinta mano. Oficialmente, se ha ido por motivos estrictamente personales. Extraoficialmente, vaya usted a saber. Es como si tuviéramos que intentar esclarecer lo que ha pasado leyendo el ¡Qué me dices! (la revista que tiene fotos hasta de tus lombrices).
Et oui, echo de menos Noche Hache, pero ahora soy mucho más feliz.
Os como a besos,
M.
Sunday, May 17, 2009
Palabras
Palabras, de MARIO BENEDETTI
¿Cómo hacerte saber que siempre hay tiempo?
Que uno sólo tiene que buscarlo y dárselo,
Que nadie establece normas salvo la vida,
Que la vida sin ciertas normas pierde forma,
Que la forma no se pierde con abrirnos,
Que abrirnos no es amar indiscriminadamente,
Que no está prohibido amar,
Que también se puede odiar,
Que el odio y el amor son afectos
Que la agresión porque sí hiere mucho,
Que las heridas se cierran,
Que las puertas no deben cerrarse,
Que la mayor puerta es el afecto,
Que los afectos nos definen,
Que definirse no es remar contra la corriente,
Que no cuanto más fuerte se hace el trazo más se dibuja,
Que buscar un equilibrio no implica ser tibio,
Que negar palabras implica abrir distancias,
Que encontrarse es muy hermoso,
Que el sexo forma parte de lo hermoso de la vida,
Que la vida parte del sexo,
Que el "por qué" de los niños tiene un porque,
Que querer saber de alguien no es sólo curiosidad,
Que querer saber todo de todos es curiosidad malsana,
Que nunca está de más agradecer,
Que la autodeterminación no es hacer las cosas solo,
Que nadie quiere estar solo,
Que para no estar solo hay que dar,
Que para dar debimos recibir antes,
Que para que nos den hay que saber también cómo pedir,
Que saber pedir no es regalarse,
Que regalarse es, en definitiva, no quererse,
Que para que nos quieran debemos demostrar qué somos,
Que para que alguien "sea" hay que ayudarlo,
Que ayudar es poder alentar y apoyar,
Que adular no es ayudar,
Que adular es tan pernicioso como dar vuelta la cara,
Que las cosas cara a cara son honestas,
Que nadie es honesto porque no roba,
Que el que roba no es ladrón por placer,
Que cuando no hay placer en las cosas no se está viviendo,
Que para sentir la vida no hay que olvidarse que existe la muerte,
Que se puede estar muerto en vida,
Que se siente con el cuerpo y la mente,
Que con los oídos se escucha,
Que cuesta ser sensible y no herirse,
Que herirse no es desangrarse,
Que para no ser heridos levantamos muros,
Que quien siembra muros no recoge nada,
Que casi todos somos albañiles de muros,
Que sería mejor construir puentes,
Que sobre ellos se va a la otra orilla y también se vuelve,
Que volver no implica retroceder,
Que retroceder también puede ser avanzar,
Que no por mucho avanzar se amanece más cerca del sol,
¿Cómo hacerte saber que nadie establece normas salvo la vida?
MARIO BENEDETTI
¿Cómo hacerte saber que siempre hay tiempo?
Que uno sólo tiene que buscarlo y dárselo,
Que nadie establece normas salvo la vida,
Que la vida sin ciertas normas pierde forma,
Que la forma no se pierde con abrirnos,
Que abrirnos no es amar indiscriminadamente,
Que no está prohibido amar,
Que también se puede odiar,
Que el odio y el amor son afectos
Que la agresión porque sí hiere mucho,
Que las heridas se cierran,
Que las puertas no deben cerrarse,
Que la mayor puerta es el afecto,
Que los afectos nos definen,
Que definirse no es remar contra la corriente,
Que no cuanto más fuerte se hace el trazo más se dibuja,
Que buscar un equilibrio no implica ser tibio,
Que negar palabras implica abrir distancias,
Que encontrarse es muy hermoso,
Que el sexo forma parte de lo hermoso de la vida,
Que la vida parte del sexo,
Que el "por qué" de los niños tiene un porque,
Que querer saber de alguien no es sólo curiosidad,
Que querer saber todo de todos es curiosidad malsana,
Que nunca está de más agradecer,
Que la autodeterminación no es hacer las cosas solo,
Que nadie quiere estar solo,
Que para no estar solo hay que dar,
Que para dar debimos recibir antes,
Que para que nos den hay que saber también cómo pedir,
Que saber pedir no es regalarse,
Que regalarse es, en definitiva, no quererse,
Que para que nos quieran debemos demostrar qué somos,
Que para que alguien "sea" hay que ayudarlo,
Que ayudar es poder alentar y apoyar,
Que adular no es ayudar,
Que adular es tan pernicioso como dar vuelta la cara,
Que las cosas cara a cara son honestas,
Que nadie es honesto porque no roba,
Que el que roba no es ladrón por placer,
Que cuando no hay placer en las cosas no se está viviendo,
Que para sentir la vida no hay que olvidarse que existe la muerte,
Que se puede estar muerto en vida,
Que se siente con el cuerpo y la mente,
Que con los oídos se escucha,
Que cuesta ser sensible y no herirse,
Que herirse no es desangrarse,
Que para no ser heridos levantamos muros,
Que quien siembra muros no recoge nada,
Que casi todos somos albañiles de muros,
Que sería mejor construir puentes,
Que sobre ellos se va a la otra orilla y también se vuelve,
Que volver no implica retroceder,
Que retroceder también puede ser avanzar,
Que no por mucho avanzar se amanece más cerca del sol,
¿Cómo hacerte saber que nadie establece normas salvo la vida?
MARIO BENEDETTI
Saturday, April 25, 2009
How can we change the "macho" attitudes to sex?
"Late diagnosis and treatment means that many continue to practice unprotected sex, running the risk of reinfection and of unknowingly infecting their partners".
What was agreed at the conference in Rio was that there needs to be a massive cultural change to try to redefine what it means to be a man for millions across the world. The UN's Mane says he believes HIV could actually provide an opportunity to start breaking down rigid and culturally entrenched beliefs. But how can this be done, and how long will it take? Discussions at this conference indicate that men's attitudes have changed little over the past 20 years, despite high HIV/Aids prevalence rates and huge amounts of money spent on promoting safe sex. To change attitudes you need to start early. Will it take another generation before significant change is achieved?
What was agreed at the conference in Rio was that there needs to be a massive cultural change to try to redefine what it means to be a man for millions across the world. The UN's Mane says he believes HIV could actually provide an opportunity to start breaking down rigid and culturally entrenched beliefs. But how can this be done, and how long will it take? Discussions at this conference indicate that men's attitudes have changed little over the past 20 years, despite high HIV/Aids prevalence rates and huge amounts of money spent on promoting safe sex. To change attitudes you need to start early. Will it take another generation before significant change is achieved?
Thursday, March 26, 2009
Sorpresa sorpresa
NO os vais a creer lo que me acaba de pasar.
Estaba yo hiperaburrida en mi despacho, a ratos transcribiendo vídeos, a ratos leyéndome Ciudadanos del mundo, de Adela Cortina, para la tesis, cuando decidí que ya eran casi las ocho y que me bajaba a comprarme un poleo-menta, porque no entendía nada, y tampoco se lo podía preguntar a nadie.
Oía aplausos, a todo esto, desde el despacho, y me preguntaba qué narices estaría ocurriendo abajo, si ya no había ni Dios en la facultad...
Je, je. Había, había. Habemus Dios en la Facultad.
Al llegar a la planta baja, me asomé a la puerta del salón de actos y... Atiza. No me lo podía creer. Allí estaba Adela Cortina in personam, fuera del libro, dando tan pancha una conferencia que iba... ¡De lo mismo! Yo miraba a los que estaban a mi alrededor alucinando, pero allí nadie parecía sorprederse. Eso sí, no había ni un solo estudiante o profesor de Traducción. Eran todos de Filosofía, y alumnos de secundaria que venían a las Olimpiadas.
Balance y conclusión de la curiosa coincidenca: ahora tengo apuntes y un resumen del libro que me estaba metiendo a cucharaditas forzadas en el despacho, explicado por la propia autora. Y le he hecho una pregunta sobre su aplicación a la Traducción y la Intepretación. Joder, si lo llego a saber lo grabamos para interpretarlo. Yo no entiendo por qué no hay más comunicación entre las facultades.
Hubo un momento al final un tanto chungo, cuando le preguntaron por lo de los condones y el Papa. Ella contestó otra cosa. Le volvieron a preguntar. Volvió a decir lo que le dió la gana, que no tenía nada que ver con eso. Decidí que era el momento de echarle un cable, aunque sólo fuera porque es Adela Cortina... Levanté súbito la mano (a Dios, encima de que te hace el favor de descender a charlar contigo, no se le pregunta más de tres veces por el gilipollas del Papa) y solté lo primero que se me ocurrió y buenamente me salió con voz temblorosa para que se fuera el debate por otros derroteros, a saber, lo importante que era el voluntariado en la formación también a nivel universitario y mi preocupación por la nueva asignatura de Deontología de la Traducción que implantarán el año que viene con Bolonia, y, perdónenme si pregunto algo muy básico, pero ¿no deberían tener los traductores e intérpretes, y probablemente todos los profesionales, además de una base deontológica, una ética de la profesión?
Joder, si no lo sabe ella, no lo sabe ni Dios. Eso, y perdónenme también por haberme colado en su ponencia. Yo no soy de Filosofía; pasaba por aqui (es nuevo para mí, esto de no ser de Filosofía, normalmente lo que no soy es de Filología, en esta ciudad).
Mi pregunta suscitó varias respuestas, y se olvidaron del Papa.
En cuanto al susodicho y los condones y el Socialismo Católico, lo único que puedo decir ahora, a posteriori, es que nadie es perfecto. Susan George tiene poca paciencia, Mona Baker se nos radicaliza, Michael Jackson se acuesta con niños y Adela Cortina cree en Dios. Ignoro si le ayudé, aunque estoy convencida de que hubiese podido salir del apuro ella solita bastante bien. Tiene gracia: yo estaba de acuerdo al 100% o al 500% con los preguntones, pero me pareció infinitamente más ético en aquel momento el permitirle a la invitada salir del paso con elegancia; una cosa es la ética y otra muy distinta la cordialidad y la buena educación.
Y sí, me hice una fotico. No suelo ser tan pelota, ni me gusta pedir autógrafos ni ser fans (parafernalias y necesidades y monas aparte). Adela Cortina y Susan George son las dos únicas excepciones; da gusto poder hacerlo porque símplemente te sale, te da la gana. Y es que crecemos; nos hacemos demasiado mayores. No puedo prometer que no volveré a hacer algo así de vomitivo jamás, porque con Chomsky y Arundhati Roy también tengo yo algo pendiente...
Estaba yo hiperaburrida en mi despacho, a ratos transcribiendo vídeos, a ratos leyéndome Ciudadanos del mundo, de Adela Cortina, para la tesis, cuando decidí que ya eran casi las ocho y que me bajaba a comprarme un poleo-menta, porque no entendía nada, y tampoco se lo podía preguntar a nadie.
Oía aplausos, a todo esto, desde el despacho, y me preguntaba qué narices estaría ocurriendo abajo, si ya no había ni Dios en la facultad...
Je, je. Había, había. Habemus Dios en la Facultad.
Al llegar a la planta baja, me asomé a la puerta del salón de actos y... Atiza. No me lo podía creer. Allí estaba Adela Cortina in personam, fuera del libro, dando tan pancha una conferencia que iba... ¡De lo mismo! Yo miraba a los que estaban a mi alrededor alucinando, pero allí nadie parecía sorprederse. Eso sí, no había ni un solo estudiante o profesor de Traducción. Eran todos de Filosofía, y alumnos de secundaria que venían a las Olimpiadas.
Balance y conclusión de la curiosa coincidenca: ahora tengo apuntes y un resumen del libro que me estaba metiendo a cucharaditas forzadas en el despacho, explicado por la propia autora. Y le he hecho una pregunta sobre su aplicación a la Traducción y la Intepretación. Joder, si lo llego a saber lo grabamos para interpretarlo. Yo no entiendo por qué no hay más comunicación entre las facultades.
Hubo un momento al final un tanto chungo, cuando le preguntaron por lo de los condones y el Papa. Ella contestó otra cosa. Le volvieron a preguntar. Volvió a decir lo que le dió la gana, que no tenía nada que ver con eso. Decidí que era el momento de echarle un cable, aunque sólo fuera porque es Adela Cortina... Levanté súbito la mano (a Dios, encima de que te hace el favor de descender a charlar contigo, no se le pregunta más de tres veces por el gilipollas del Papa) y solté lo primero que se me ocurrió y buenamente me salió con voz temblorosa para que se fuera el debate por otros derroteros, a saber, lo importante que era el voluntariado en la formación también a nivel universitario y mi preocupación por la nueva asignatura de Deontología de la Traducción que implantarán el año que viene con Bolonia, y, perdónenme si pregunto algo muy básico, pero ¿no deberían tener los traductores e intérpretes, y probablemente todos los profesionales, además de una base deontológica, una ética de la profesión?
Joder, si no lo sabe ella, no lo sabe ni Dios. Eso, y perdónenme también por haberme colado en su ponencia. Yo no soy de Filosofía; pasaba por aqui (es nuevo para mí, esto de no ser de Filosofía, normalmente lo que no soy es de Filología, en esta ciudad).
Mi pregunta suscitó varias respuestas, y se olvidaron del Papa.
En cuanto al susodicho y los condones y el Socialismo Católico, lo único que puedo decir ahora, a posteriori, es que nadie es perfecto. Susan George tiene poca paciencia, Mona Baker se nos radicaliza, Michael Jackson se acuesta con niños y Adela Cortina cree en Dios. Ignoro si le ayudé, aunque estoy convencida de que hubiese podido salir del apuro ella solita bastante bien. Tiene gracia: yo estaba de acuerdo al 100% o al 500% con los preguntones, pero me pareció infinitamente más ético en aquel momento el permitirle a la invitada salir del paso con elegancia; una cosa es la ética y otra muy distinta la cordialidad y la buena educación.
Y sí, me hice una fotico. No suelo ser tan pelota, ni me gusta pedir autógrafos ni ser fans (parafernalias y necesidades y monas aparte). Adela Cortina y Susan George son las dos únicas excepciones; da gusto poder hacerlo porque símplemente te sale, te da la gana. Y es que crecemos; nos hacemos demasiado mayores. No puedo prometer que no volveré a hacer algo así de vomitivo jamás, porque con Chomsky y Arundhati Roy también tengo yo algo pendiente...
Monday, March 23, 2009
Wakie wakie
Wakie wakie.
El secreto está en la constancia.
Sin despertador, un domingo, me despierto ya a las nueve.
Con despertador, a las siete.
Sigo cambiando poco a poco mi reloj interno. Me levanto, hago un cafetito, y enciendo gchat. Y él ya está esperándome porque se levanta incluso antes que yo, y sin despertador.
Cada mañana, sí, vale reírse, cantamos esto por gvideo en tiempo real antes de empezar a tesisear:
Good morning!
¿Quién puede pedir más?
El secreto está en la constancia.
Sin despertador, un domingo, me despierto ya a las nueve.
Con despertador, a las siete.
Sigo cambiando poco a poco mi reloj interno. Me levanto, hago un cafetito, y enciendo gchat. Y él ya está esperándome porque se levanta incluso antes que yo, y sin despertador.
Cada mañana, sí, vale reírse, cantamos esto por gvideo en tiempo real antes de empezar a tesisear:
Good morning!
¿Quién puede pedir más?
Wednesday, March 18, 2009
The name of the game
Sometime between the exact moment an Orange
mobile drowned in a glass of water and the second
the bike waiting for its owner outside was
finally retrieved,
a lone and Holy Condom on the stinking ground wondered
the exact number of contacts that were being kept.
Sacred, Highest condom, but also a complete one;
completely full of holes. Holy shit.
Holey the list of unfinished business.
The Pope left it there for the Happy Little "Africuns", so they lead
a Wholly Holy life
and give birth to swarms of content and insignificant
African termites.
He made the latex holey, which means their tits will be
sucked dry
before they are infested with rabbies
and she-"Africuns" herpes.
Virulent anger.
Their offspring will kill your Holiness, sucking blood from the Sacred dick and bringing puss out of Thine Warts before anyone can draw a comparison between Their Roundnesses The Warts and Google's Earth.
La terre selon Google.
La crise selon L'Arbuste.
What do I try to convey by such anaphora?
I've been in this joint before, 'tis mine Old History. I'm not here just out of friendship, but also out of principle. I'm here because I believe this joint doth not have to smell of Thee, nor Thou of the freaking joint. Nor the frigging ground of piss, around the Holy condom. It's not that I don't like it, mind you. I'm just a horny animal. Let's not pretend we're all as Holy, happy little "Africuns".
You have to give it to me, that I'll be fair and Libra. I'm here...
I'm here just in case. No need to justify my presence; you needed help.
I'm here to provide a balance, not the ingredients
-one cannot weigh this joint's darkness
against the clouds of smoke.
Who the hell signed me up for the job as counterfan?
Even my blouse proclaims I'm a Holy, Wholly Mum.
I'm someone's mother though not hers.
My tits are like your auntie's cow's.
I will wake up at seven, finish the thesis, get a permanent job, a pension and three children with amalgamated names whose initials will match the bilingual schools where they'll be taught "them out-of-date principles" which will be wholly-holey-but-Wholly-Holy.
Their father skypes every day.
Don't you dare judge me, don't you dare
cast a glance upon Thine lady's blouse, now, thus unprotected.
Principles are also contagious.
mobile drowned in a glass of water and the second
the bike waiting for its owner outside was
finally retrieved,
a lone and Holy Condom on the stinking ground wondered
the exact number of contacts that were being kept.
Sacred, Highest condom, but also a complete one;
completely full of holes. Holy shit.
Holey the list of unfinished business.
The Pope left it there for the Happy Little "Africuns", so they lead
a Wholly Holy life
and give birth to swarms of content and insignificant
African termites.
He made the latex holey, which means their tits will be
sucked dry
before they are infested with rabbies
and she-"Africuns" herpes.
Virulent anger.
Their offspring will kill your Holiness, sucking blood from the Sacred dick and bringing puss out of Thine Warts before anyone can draw a comparison between Their Roundnesses The Warts and Google's Earth.
La terre selon Google.
La crise selon L'Arbuste.
What do I try to convey by such anaphora?
I've been in this joint before, 'tis mine Old History. I'm not here just out of friendship, but also out of principle. I'm here because I believe this joint doth not have to smell of Thee, nor Thou of the freaking joint. Nor the frigging ground of piss, around the Holy condom. It's not that I don't like it, mind you. I'm just a horny animal. Let's not pretend we're all as Holy, happy little "Africuns".
You have to give it to me, that I'll be fair and Libra. I'm here...
I'm here just in case. No need to justify my presence; you needed help.
I'm here to provide a balance, not the ingredients
-one cannot weigh this joint's darkness
against the clouds of smoke.
Who the hell signed me up for the job as counterfan?
Even my blouse proclaims I'm a Holy, Wholly Mum.
I'm someone's mother though not hers.
My tits are like your auntie's cow's.
I will wake up at seven, finish the thesis, get a permanent job, a pension and three children with amalgamated names whose initials will match the bilingual schools where they'll be taught "them out-of-date principles" which will be wholly-holey-but-Wholly-Holy.
Their father skypes every day.
Don't you dare judge me, don't you dare
cast a glance upon Thine lady's blouse, now, thus unprotected.
Principles are also contagious.
Wednesday, February 18, 2009
Monday, February 16, 2009
Teamwork
Teamwork
Sincerity
Solidarity
Humanity
Comradeship
Compassion
Trust.
Respect
Sharing
Support
Generosity
Care
Space
Company
Understanding
Empowerment
Help
Sincerity
Solidarity
Humanity
Comradeship
Compassion
Trust.
Respect
Sharing
Support
Generosity
Care
Space
Company
Understanding
Empowerment
Help
Sunday, February 15, 2009
Friday, January 9, 2009
Sin tesis no hay paraíso
Parece ser que las cosas cambian y las vidas dan vuelcos inesperados.
Están los que se alegran, las que se solidarizan, y aquellos a quienes les da exactamente igual que te vaya bien o te vaya bastante mal. Otros, ni preguntan. Unos luchan por mantenerse, y algunos se dejan ahogar. Otras avanzan a pasos agigantados quizás porque aprenden de los errores casi casi sin quererlo y tan aprisa que da vértigo pensarlo... Ponderemos, todos, ya.
El constructivismo aplicado a las relaciones personales.
Al final uno aprende igual, cada cual a su ritmo. Unos a base de hostias, otros como los arenques y los más listos con pedagogía crítica.
Me da vértigo ser guardería bilingüe, pero ya no me da miedo. Antes sí. Me hacía sonrojarme y sentirme a veces preciada y otras moneda de cambio, lo cual si lo piensas bien, en el fondo, es una guarrada. Y ahora creo que me apetece la idea porque sería una carga compartida al cincuenta por ciento, no una labor del hogar más, bajo mi dulce y santa responsabilidad. En el paradisiaco valle alimentado por el río vital que corre entre mis maternales pechos. Quien pudiera pararse a escribir de verdad, cosas, que no hicieran tanta gracia.
Sin tesis no hay paraíso.
La responsabilidad social y la ética hacker: el aprendizaje de la deontología interpersonal en una minisociedad de dos.
Ser guardería bilingüe tú sola, aun siendo dos, suena a madre de alquiler o nodriza o chica o chacha. El concepto de 'guardería trilingüe', puestos a elegir, se me hace más solidario. Hacer las cosas en equipo ya es bonito... Se parece a lo que una siente cuando le dicen 'transcripción colectiva' o 'intérprete de lengua de signos'. Son términos que suelen ir seguidos de un 'Oooooh' y de un 'qué moooono'. O de una mirada idiota. Ternero. Suckling. Petit-suisse. Alevín. Lechal. Quiero hacer listas de palabras sonrientes y lo único que me salen son títulos de conferencias políticamente incorrectas debido a su carga sociocrítica y apabullante sinceridad.
Análisis y evaluación de una interfaz de 'Hermeneútica para el Desarrollo' (oooh, qué moooono).
Hacia un nuevo paradigma de la ética interpersonal abierta y libre, ya sea autodidacta o de uso en clases convencionales.
En pos de un modelo constructivista estructurado en equipo, pero más justo y solidario.
Nah. Estas pajas mentales sólo me las publicarían en Francia.
Están los que se alegran, las que se solidarizan, y aquellos a quienes les da exactamente igual que te vaya bien o te vaya bastante mal. Otros, ni preguntan. Unos luchan por mantenerse, y algunos se dejan ahogar. Otras avanzan a pasos agigantados quizás porque aprenden de los errores casi casi sin quererlo y tan aprisa que da vértigo pensarlo... Ponderemos, todos, ya.
El constructivismo aplicado a las relaciones personales.
Al final uno aprende igual, cada cual a su ritmo. Unos a base de hostias, otros como los arenques y los más listos con pedagogía crítica.
Me da vértigo ser guardería bilingüe, pero ya no me da miedo. Antes sí. Me hacía sonrojarme y sentirme a veces preciada y otras moneda de cambio, lo cual si lo piensas bien, en el fondo, es una guarrada. Y ahora creo que me apetece la idea porque sería una carga compartida al cincuenta por ciento, no una labor del hogar más, bajo mi dulce y santa responsabilidad. En el paradisiaco valle alimentado por el río vital que corre entre mis maternales pechos. Quien pudiera pararse a escribir de verdad, cosas, que no hicieran tanta gracia.
Sin tesis no hay paraíso.
La responsabilidad social y la ética hacker: el aprendizaje de la deontología interpersonal en una minisociedad de dos.
Ser guardería bilingüe tú sola, aun siendo dos, suena a madre de alquiler o nodriza o chica o chacha. El concepto de 'guardería trilingüe', puestos a elegir, se me hace más solidario. Hacer las cosas en equipo ya es bonito... Se parece a lo que una siente cuando le dicen 'transcripción colectiva' o 'intérprete de lengua de signos'. Son términos que suelen ir seguidos de un 'Oooooh' y de un 'qué moooono'. O de una mirada idiota. Ternero. Suckling. Petit-suisse. Alevín. Lechal. Quiero hacer listas de palabras sonrientes y lo único que me salen son títulos de conferencias políticamente incorrectas debido a su carga sociocrítica y apabullante sinceridad.
Análisis y evaluación de una interfaz de 'Hermeneútica para el Desarrollo' (oooh, qué moooono).
Hacia un nuevo paradigma de la ética interpersonal abierta y libre, ya sea autodidacta o de uso en clases convencionales.
En pos de un modelo constructivista estructurado en equipo, pero más justo y solidario.
Nah. Estas pajas mentales sólo me las publicarían en Francia.
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