Monday, July 9, 2007

Ahora viene lo mejor


-¡Eva!

Se da la vuelta.
-¿Sí?

-Cuando pases el control de pasaportes, mira dentro de tu mochila.

Sonríe y responde como quien tiene un secreto desde hace dos días.
-Cuando vuelvas a Salamanca, mira debajo de tu almohada.

My turn to be surprised.

Llegué a Salamanca preocupada por la mia mamma y el concurso, muerta de sueño y dispuesta a echar la siesta. Se me olvidó mirar debajo de la almohada hasta que me topé con un paquete cuando desperté.

Lo último que pensé fue que pudiera, sin previo aviso, a mis 28 tacos de edad, recuperar la ilusión, la emoción de recibir un regalo sorpresa y una carta.

Los mejores regalos, lovely people, no cuestan nada. Los mejores regalos se improvisan en un folio a cuadros, arrancado de un cuaderno, con las virutillas colgando. Las cartas que merece la pena leer y releer son las que se escriben con el corazón en la mano, acento italiano y alguna que otra falta (pero muy pocas); las mejores frases, aquellas que te dejan sin palabras...

"Tú has sido un modelo"

No pude por menos que echarme a llorar.

Al día siguiente, cuando le conté a B. esto del espíritu del regalo, me recordó aquella frase de Neruda:

Quiero hacer contigo lo que la primavera hace con los cerezos.

2 comments:

Anonymous said...

¡Ay M. que' mona eres!que bonito ese post,me encanta.Te echo de menos pero con ese blog te sentire mas cerca de mi.Un besoooo!!!!

M. said...

Nenaaaaa!!!

¿Qué haces en Italia?

Vuelve ahora mismo.